Este pasado miércoles 1 de marzo
se celebró una nueva jornada de Iniciación Deportiva en Educación Primaria,
participando en esta ocasión el curso de 3º A.
Hasta
el polideportivo “El Sargal” se desplazaron los niños y niñas de ese curso para
participar en la jornada, acompañados de varios maestros.
La
jornada se desarrolló íntegramente en El Sargal, utilizando la pista central,
la pista “Esperanza Calvo”, el frontón interior y la pista exterior
polideportiva. La mañana acompañó y fue posible el desarrollar una de las
actividades en el exterior.
Los
alumnos de 3º A se dividieron en 4 equipos que fueron rotando para pasar por
las 4 actividades/juego que había para esa mañana.
Las
modalidades deportivas, en forma jugada, que se plantearon fueron:
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Boccia (juego de blanco y diana): dos equipos se
sitúan en un espacio común, con salida desde uno de los extremos en el que se
situarán los boxes de lanzamiento. A continuación se situará el área de
lanzamiento. El objetivo del juego es aproximarse lo más posible con cualquiera
de las bolas del equipo a la bola blanca o diana. Conseguirá un punto el equipo
que más próximo haya dejado una de sus bolas a la bola blanca o diana. Cada equipo
dispone de 6 bolas (rojas o azules) y cada jugador lanza 2 bolas. Se considera
bola perdida la que salga del espacio de juego y por tanto no será válida. Este
juego es parecido a la petanca.
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Goalball: dos equipos se sitúan en el espacio de
juego dividido en su mitad por una línea que delimita el campo propio y el
contrario. En los fondos del terreno de juego se ubicarán las porterías o
líneas de fondo/puntuación. El objetivo del juego es pasar el balón rodando por
la línea de gol del equipo contrario, teniendo en cuenta que los jugadores van
con antifaces para no ver. Este juego es un deporte paralímpico creado
específicamente para personas invidentes o con deficiencia visual. Será gol y
por tanto conseguirá punto, el equipo que envíe el balón más allá de la línea
de fondo o entre completamente en la portería del equipo contrario. Todos los
jugadores juegan con antifaz y se usa un balón con cascabeles. El balón ha de
tocar el suelo al menos una vez en el campo propio antes de pasar al contrario.
Cada equipo estará compuesto por 3 jugadores en el campo, los demás serán
suplentes e irán saliendo por algún compañero.
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Long ball (bate y campo): en un espacio común
estarán dos equipos con funciones
diferenciadas (ataque y defensa). En ambos extremos del espacio de juego se
situarán dos bases, una identificará la zona de pateo, siendo igualmente base
de cierre o carrera. La otra estará situada en el extremo contrario como lugar
intermedio de carrera (primera base). Entre ambas se situará la base del
receptor. El objetivo del juego es conseguir carrera tras la realización del
pateo y la realización del recorrido existente entre la primera base y la de
cierre o carrera. La consecución de carrera otorgará un punto al equipo
atacante. El equipo atacante iniciará la entrada mediante el pateo del balón,
siempre hacia delante de su posición de lanzamiento. El equipo defensor podrá
eliminar a un contrario si hace llegar al balón a la base del receptor antes de
que llegue a cualquiera de las dos bases del espacio de juego. Existirá un
cambio de roles cuando el equipo atacante hay realizado tres entradas o
lanzamientos, cuando el equipo defensor recepcione un balón al aire o cuando el
equipo defensor elimine a los tres integrantes del equipo contrario. Este juego
es parecido al béisbol.
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Atrapa la bandera: dos equipos se sitúan en un
espacio dividido por una línea o frontera que delimita el campo propio y el
contrario. En los fondos del terreno de juego se ubicarán dos banderas o
pañuelos (una que defender y otra que conseguir). El objetivo del juego es conseguir la bandera
del equipo contrario y llevarla al campo propio sin ser pillado por un
defensor. Consigue un punto el equipo que lleve la bandera contraria a su campo
sin ser atrapado por los oponentes. En tal caso la bandera será devuelta a su
posición original. Los jugadores podrán ser pillados en campo contrario cuando
sean tocados o atrapados, debiendo sentarse en el suelo no pudiendo participar
en el juego mientras no sean salvados por un compañero mediante toque o palmada.
A mitad de la
mañana se hizo un descanso para reponer fuerzas, almorzando todos los niños
juntos. Después se continuó con la actividad.
Al terminar la
jornada despedida en el centro de la pista por parte de los monitores que
dirigieron los juegos y regreso al colegio con la alegría de haber podido
participar en una intensa jornada deportiva en la que pudieron convivir con
niños y niñas de otros colegios de Cuenca capital y provincia.
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